martes, 3 de marzo de 2009

Ganas...

Debo reconocer que tengo ganas... es vergonzoso, lo sé, pero cierto.
Tengo ganas, a mi edad y con la experiencia; unas ganas espantosas que me están comiendo por dentro y no me dejan dormir, comer o escribir a gusto...
Es una vergüenza, me digo a mí misma una y otra vez...
Pero qué le hago,tengo ganas, muchas ganas...
Y aunque se me note, no pienso hacer nada.
No pienso llamarle, ni mandarle mensaje, ni escribirle un mail o enviarle una tarjetita...
No, y no importa cuántas mugres ganas tenga de volver a estar con él, de verlo, de platicar, de contarle un chiste, no cederé a mis deseos... esta vez tendrá que ser mi celular el que suene...
Mientras, ¿alguien tendrá un libro, una botellita de vino y un par de esas pastillitas holandesas que salieron directo de The eternal sunshine of a spotless mind? Si les sobran... háblenme...

No hay comentarios: